Cine
8 películas argentinas de acción de los últimos 20 años
Con el arribo a Youtube de uno de los grandes estrenos de género nacional de este año como lo es Nacido para morir (para verla hacer click ACÁ) de Andrés Borghi (entrevista ACÁ); es el momento oportuno para repasar lo mucho que ha crecido el cine de acción en un último y antojadizo período. Es momento de otro top, las ocho películas argentinas de acción de los últimos 20 años, y hay yapa:
Comodines
Suar y Carlín se cubren las espaldas en Comodines
Adrián Suar venía de romperla con su flamante rol de productor en la serie televisiva Poliladron (una de nuestras diez mejores series nacionales). Siguiendo una temática similar y prometiendo una frontera que hasta ese momento el cine no había alcanzado; se estrenó este film de 1997 dirigido por Jorge Nisco convirtiéndose en el más grande éxito nacional de ese año.
El argumento no podría ser más sencillo y a la vez más eficaz, dos policías disímiles (Suar y Carlos Calvo) unen fuerza para desbaratar a una red de narcotráfico en la que se encuentra envuelto un doble agente.
Cine argentino queriendo imitar clásicos extranjeros con mucha producción y ese toque de costumbrismo que “El Chueco” lleva en la sangre. En su momento fue bastardeada y objeto de burla, con el tiempo adquirió un status de culto y cierto reconocimiento sobre lo que se quiso empezar a hacer, una suerte de quiebre para el género local.
La Venganza
Torres y Novoa a los tiros y corriendo de las explosiones en La Venganza
Siguiendo con el ítem anterior; en ese mismo año, se creó también una suerte de rencilla de taquilla (digna del también noventoso Disney-Amblin) con los estrenos anuales de Pol-Ka (Comodines) y Argentina Sono Film (La Furia, de corte policial más tradicional); batalla que continuó durante algunos años.
Exactamente, dos años después, en 1999, ASF logró su título respuesta al film de NIsco, utilizando a la pareja de la también exitosa La Furia (Diego Torres y Laura Novoa), pretendiendo en un primer momento repetir director (Juan Bautista Stagnaro); pero en un plan más cargado de corridas y explosiones.
Torres es Pablo, un joven ambicioso, empleado en un laboratorio, al que ascienden repentinamente; pero tras ese ascenso se esconde algo oscuro. La muerte de un tío cambiará su perspectiva y cuando decida desenmascarar a sus jefes; bueno, que reviente todo.
La Venganza tiene alta producción, acción más medida, y un argumento a medias entre el policial tradicional argentino, con denuncia social incluida, y lo nuevo que se estaba gestando; lo cual se ve muy favorecido por la realización del mayor estandarte del cine policial local de los ’80, Juan Carlos Desanzo. Es de esas películas que hay que revalorizar.
Peligrosa Obsesión
De cómo sacar facha aún cuando te apuntan con un arma en Peligrosa Obsesión
Pablo Echarri y Mariano Martinez protagonizan esta co-producción con Brasil del año 2004 dirigida por Raúl Rodriguez Peilá, que intenta nuevamente traer un producto mainstream puro de acción con tintes criollos.
La historia sigue a Javier (Echarri), heredero de una empresa de camiones que lo pierde todo, y debe enfrentar a los nuevos dueños de la misma los cuales manejan oscuros negocios con el narcotráfico (obviamente). Javier no está solo, y forma un trío con el ladronzuelo Tony (Martinez) y una brasilera (Carol Castro) que no queda muy claro que rol cumple.
Película de acción hecha y derecha, con todos los ítems del reglamento y algo de comicidad paródica forzada. El rol de Victoria Onetto está entre los mejores de este tipo de películas. Otra obra bastardeada (aunque a sotto voce se le reconocían valores) que habría que reveer como una curiosidad e intento.
Tiempo de Valientes
Luque y Peretti practican tiro para descargar tensiones en Tiempo de Valientes
En el medio de esas dos grandes ficciones televisivas como fueron Los Simuladores y Hermanos y Detectives; Damián Szifrón se despachó en 2005 con esta película que, más allá de su comicidad, es un gran thriller de acción.
Elevándose por sobre el tópico de las Buddy Movies, con uno de los polos “policía accidental”; Szifrón le escapa un poco al asunto del narcotráfico para referirse al contrabando de material químico con las fuerzas de seguridad especiales comprometidas.
Diego Peretti, como un psicoanalista que debe cumplir una probation, y Luís Luque como un policía con algunos problemitas emocionales; son sin duda alguna la dupla perfecta del cine nacional de género. Si hay una película que nada le debe a las producciones hollywoodenses, es esta.
Diablo
Las cosas se van a poner violentas para Marcos en Diablo
Y nos adentramos de lleno en el cine independiente con uno de sus mayores sucesos. Crítica y público estuvieron de acuerdo en celebrar este film de 2011 de Nicanor Loreti.
El aguante se respira en cada fotograma de esta historia diferente, que contiene acción, y mucha; pero a la que cuesta encuadrarla. Marcos, El Inca del Sinaí (Juan Palomino) es un ex boxeador retirado luego de matar a uno de sus rivales en el ring. Ya no quiere problemas, solo busca paz; pero el mismo día en que espera a su ex pareja, su primo Huguito (Sergio Boris) llama a su puerta, y no son buenas noticias.
Un verdadero desmadre en el que todo puede pasar y se respira un alto grado de adrenalina y testosterona. Después de todo, si está Kato, El Ninja, hay acción asegurada.
Consagrado con este film, Loreti se convirtió rápidamente en un referente del género, perfeccionando su estilo con ese otro hito que fue Kryptonita, y su Liga de la Justicia del Oeste Matancero.
Justicia Propia
Uno de los pocos momentos en que no rompen todo de Justicia Propia
Al cine de acción autóctono le faltaba uno de esos héroes de acción propios del cine de explotación de los ’80 capaz de cargarse él solo a la muchedumbre que se le cruce en frente. En 2013, el doble de riesgo Juan Manuel Olmedo se cargó el proyecto de Justicia Propia a cuesta para cubrir esta ausencia.
Diego Ponce (Olmedo) es un agente especial convocado únicamente en esos casos que necesitan su accionar salvaje pero infalible. De regreso a su ciudad, descubre una red de narcotráfico en la fuerza (cuándo no) y en venganza terminan asesinando a su sobrina; se metieron con el hombre equivocado.
El film gestado a pulmón por Juan Manuel, dirigido por Sergio Mastroberti, cumple a rajatabla la receta del relato cargado de acción y ritmo vertiginoso; transformándolo en un título ineludible para el género más allá de alguna precariedad típica de un film muy independiente. Hace más de un año se promete una secuela que ya cambió de título y de la que se sabe un gran dato, participará el inoxidable Michel Qissi, Tong Po de Kickboxer.
Baires
Vicuña y Palacios, juntos a la par contra los narcos secuestradores de Baires
Una pareja de regreso en Argentina, una banda mafiosa involucrada (otra vez) en el narcotráfico, un secuestro, un hombre común llevado a cometer un acto que no desea, y la solución en manos de un policía especial.
Marcelo Páez Cubells dirige esta película que intenta emular el estilo ligero hollywoodense mechado con algo de comicidad rayano a la exageración. Benjamín Vicuña, Germán Palacios, Sabrina Garciarena, y Carlos Belloso son los protagonistas en una propuesta que, puede no ser el mejor exponente del género acción, pero que, aún a fuerza involuntaria, termina siendo una propuesta muy divertida. ¿Quién puede resistirse a la risa con la Juana Viale mexicana?
8 Tiros
Aráoz planea explotar su pasado en 8 Tiros.
2016 arrancaba la temporada de estrenos nacionales con este thriller de acción con mucho clima.
Daniel Araoz y Luís Ziembrowski son dos hermanos enfrentados por los negocios oscuros (sí, narcotráfico). Todos creían que Juan (Aráoz) había muerto, pero regresa para el funeral de su madre, buscará redención y venganza del pasado.
Bruno Hernández dirigió uno de los grandes títulos de género que nos dejó ese año, algo injustamente ignorado, y que contiene un ingrediente que la hace interesante, la valorización de los automóviles clásicos como un elemento del género. Adrenalina al por mayor y varias muertes memorables.
Los títulos mencionados previamente son los que mejor se encuadran dentro del género, pero, aun así, podemos encontrar altas dosis de acción en comedias como Socios por accidente 1 y 2 del ya mencionado Nicanor Loreti (sin dudas un experto en la materia) y Fabián Forte (entrevista a ambos ACÁ), o Bailando con el Peligro (para verla también, click ACÁ) que nos devuelve al inicio del informe tras la dirección de Andrés Borghi.
Como sea, las seleccionadas ocho películas nacionales de acción, son las que mejor demuestran los avances que ha tenido el género en nuestro país durante el último período. Carguen sus armas, preparen sus puños y piernas, el estallido local está por comenzar.
