REVIEW: Limbo (Episodios 1 y 2)

Finalmente comenzó Limbo, la serie web dirigida por el talento local Fabian Forte para la plataforma Playz (streaming español de RTve), co-producción entre los dos países. ¿Qué pudimos ver en sus dos primeros capítulos?

Una relación con interferencias

Tal cual lo habíamos anticipado en ESTA NOTA , luego de su presentación a modo de adelanto exclusivo en el Showcase de RTve, Limbo tuvo su desembarco definitivo en la plataforma de streaming Playz, la cual el grupo de medios estatales español utiliza para publicar contenido propio y exclusivo en constante crecimiento.

El dato positivo es que su contenido puede ser visualizado desde cualquier parte del mundo, por lo cual no tuvimos que esperar más para saber cómo comenzó Limbo.

Definitivamente Limbo es una serie para las nuevas generaciones, refiriéndonos a los modos actuales de poder ver contenido cultural, atravesados por la red.

Capítulos cortos (siete en su totalidad, que no se extienden a más de diez minutos cada uno, lo cual daría en su conjunción algo así como un largometraje fraccionado), con una historia muy ganchera, fácil de atraparnos, y que aprovecha el formato para sí. Pero vamos, ¿qué nos presenta Limbo?

Básicamente estamos en presencia de una historia de amor, o no, porque en manos del director de Malditos sean y El muerto cuenta su historia, algo turbio hay detrás.

La primera escena ya nos presenta algo amenazante. Alguien, ¿un intruso?, que filmó una privacidad ajena desde una pantalla rota; acto seguido, volvemos hacia atrás. Lidia (Ingrid García Jonsson) se muda a su nueva casa, aparentemente alejada según le oímos decir; e inmediatamente se pone en contacto vía Skype con Wally (Demián Salomón), el anterior dueño de la casa, que actualmente reside en Argentina.

La excusa son unas preguntas sobre el hogar, las llaves de una puerta que no abre y alguna cosa más, pero casi inmediatamente entre ellos surge algo. ¿Amor a primera vista? En todo caso a primer click.

Hay algo que llama la atención de Wally. En el hogar ahora de Lidia, parece haber mala conexión de wi-fi, en realidad muy mala, problemas con el router quizás. El videochat entre ellos se corta constantemente y la imagen desde la pantalla de Wally se distorsiona con roots y glitches insistentes.

Esas interferencias serán uno de los primeros “temas” de conversación entre ellos, tratando de solucionarlos, infructuosamente. Pronto conoceremos más de la vida de uno y del otro, siempre sin moverse frente a las pantallas/cámaras.

Lidia es actriz, dramaturga y directora de teatro; Wally es montajista (atención con los easter eggs en su pantalla para los entendidos), ¿serán las artes una temática a futuro?

Ella parece buscar un refugio en ese lugar apartado, y él desea hacerle compañía acortando distancia oceánica a través de las redes. Nuestro ojo atento puede apreciar algo que ellos aún no: en uno de los glitches se vio algo, fugaz, ¿qué?, todavía no lo sabemos.

Limbo, el maestro hace a la técnica

En realidad, no es la primera vez que se utilizan estos medios para narrar una historia, ni siquiera sería la primera vez que se utiliza en el terror.

En 2014, recordarán al sorpresivo hit de Blumhouse Eliminar amigo, que contaba cómo un grupo de amigos en un chat grupal iban siendo eliminados literalmente por alguien a quien ellos habían acosado. También tuvimos el famoso cortometraje local Alexia de Andrés Borghi (relacionado en la producción de Limbo), y al film alemán Friend Request con temática y sistema muy similar (tanto que llevó a Borghi a un reclamo por plagio a los alemanes).

Lo que diferencia a Limbo es la mano de Fabián Forte detrás. Tanto en Eliminar amigo como en Fiend Request, el uso de las cámaras de celulares y webcams de monitores de notebooks/PC, resultaban un inconveniente similar al que apreciamos en la mayoría de los films “found footage”. El producto se apreciaría igual, y hasta mejor, de ser filmado de modo tradicional, y no se lograba generar un real nervio por las interferencias o limitaciones; ni hablar de generar una unión sólida entre los personajes.

Limbo se aprovecha del medio y lo vuelve a su favor, tal como sucedía en el logrado Alexia. Las cámaras/pantallas de las notebooks y smartphones de Lidia y Wally sirven para crear un clima íntimo muy rico para la relación. Permanentemente se miran y se buscan. Hay una utilización de todo el cuadro, con varias ventanas de pantalla a la vez, y el fondo (siempre el foco de los problemas es el hogar de Lidia, hasta ahora) como algo a lo que prestarle atención. La imposibilidad lógica de los planos amplios es favorable para poder aprovechar eventos sorpresivos.

Más notorio es en los roots y glitches: a no temer si no saben de qué hablo, al verlo se explica por sí solo. La imagen y el audio roto generan un clima de mucha tensión aunque estén hablando de algo simple. El rostro de Lidia se fragmenta, alrededor de ella se van generando sombras rotas y se crea una idea de que en cualquier momento puede aparecer algo que nos sorprenda en medio de esos cuadriculados y rayaduras de imagen. El sonido se pierde, se vuelve turbio, confuso, y no sabemos si es una posesión o una simple falla en la conexión de la protagonista.

En estos episodios, el recurso lejos de cansar se potencia, va creciendo y se vuelve cada vez más enigmático, como una pieza fundamental más que un adorno o disimulo. Los cliffhanger al finalizar cada episodio, alrededor de estas fallas, suman al deseo de saber cómo progresa esta experiencia. Tanto que hasta los créditos finales, simples, como si se estuviese leyendo una pantalla de DAT o de error y recuperación, sorprenden, incomodan y generan un clima sugestivo.

Dos a quererse y protegerse

Otro acierto es la elección de los actores y el modo en que Forte los hace interactuar. Ingrid García Jonsson y Demián Salomón manejan un gran carisma, hacen creíbles a Lidia y Wally, y -lo mejor- hacen creíble la relación entre ambos. Aunque probablemente sus escenas hayan sido filmadas individualmente, generan química y se palpa la relación que va creciendo entre ellos de modo espontáneo, a la par que el aura de extrañeza alrededor de Lidia y la preocupación de Wally. Todo esto con solo dos capítulos.

Aún nos falta ver al tercer personaje, ¿quién es Rodrigo?, ¿por qué Lidia decidió alejare?, y lo más importante ¿qué es lo que sucede en esa casa?

[imdb]https://www.imdb.com/title/tt7948260/?ref_=nm_flmg_dr_1[/imdb]