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Críticas

REVIEW: Narcos Temporada 2

En Narcos Temporada 2 acompañaremos al criminal más infame del siglo 20 a través de la recta final de su violenta y espectacular vida.

¡Me buscan, Limón!

Este proyecto creado por Chris Brancato, Doug Miro y Carlo Bernard (producido por el cineasta brasileño Jose Padilha, quien también dirigió gran parte de la primera temporada) ha logrado ser original y fresco dentro de un genero sobre-explotado, contando una historia millones de veces contada.

Influenciados por aquellos que mejor supieron relatar historias de ascenso y caída del mundo criminal (mira nuestra nota sobre ello ACA), en la primera temporada abordaron el complejo tema del narcotráfico desde un lugar realista y crudo pero al mismo tiempo entretenido y didáctico, mostrándonos el poco lugar que hay para la dicotomía “blanco o negro” en una realidad tan sobredeterminada como lo es la del violento mundo narco. En esa primera parte, seguimos a Pablo Escobar desde sus inicios hasta que alcanza el pico de poder absoluto y comienza su descenso. Es así que la temporada uno finaliza con su escape de La Catedral, suceso que da inicio a la caída.

En Narcos Temporada 2 vamos a ver la otra cara de la moneda. Este monstruo, que hasta el momento parecía intocable, comienza a perder de a poco su poder. Retomando exactamente donde nos había dejado la temporada anterior, seremos testigos de cómo prácticamente todo el mundo (autoridades colombianas, extranjeras, ciudadanos, otros criminales), durante casi un año, se embarco en una cacería en busca de Pablo Escobar.

La vida imita al arte

Si la temporada anterior había tenido un tratamiento -tanto narrativo como de personajes- muy al estilo Goodfellas, en esta oportunidad la referencia es Breaking Bad ( sobre todo la última temporada). Esto se debe a que la serie pasó de ser un relato épico criminal que abarcaba una extensa linea de tiempo, a un intenso drama más avocado a los personajes, haciendo foco en los últimos días de Escobar

El hecho de tener que hacerse cargo narrativamente de un periodo de tiempo acotado, le permitió a los guionistas  desarrollar con la profundidad justa y necesaria a todos los personajes y sus lineas argumentales. Ademas, este desarrollo resulta funcional a la historia que se quiere contar, lo cual no es poca cosa; últimamente hay series que abren (y no cierran) lineas argumentales absurdas e inútiles, con el único fin de rellenar una temporada o asegurarse una nueva (si, te hablo a vos Mr. Robot).

Todos los capítulos son importantes para la trama Cada uno de ellos tiene algo para decir. Pero no solo eso: al mismo tiempo son sumamente entretenidos y atrapantes, me atrevo a decir que -dada la excelente dirección con la que cuentan- mas de uno merece volver a ser visto e incluso puede ser disfrutado sin haber visto ningún otro. Ejemplo de ello es el excelente Alemania 93, episodio que recuerda un poco (salvando las distancias) al tremendo episodio Dead Freight de Breaking Bad, por su crudo retrato de las consecuencias de estar en el lugar y el momento equivocados.

Simpatía por el diablo

Podrá no hablar el español más claro y fluido, ni lograr el acento paisa tan característico del verdadero Escobar, pero Wagner Moura es un ANIMAL de la actuación. El brasileño se luce interpretando a este contradictorio y cautivador personaje. La potencia y profundidad con la que lleva adelante su trabajo, humaniza completamente al monstruo colombiano al que representa y nos obliga a sentir empatía por el. Desde luego, Pablo no es el primer criminal con el que la televisión nos a hecho simpatizar, pero este caso es mucho más engorroso para nuestra moral, porque las atrocidades de este villano son de público conocimiento.

Hablando de monstruos adorables, no pude evitar ver en la interpretación de Moura al Tony Soprano de Gandolfini. Si bien las circunstancias y algunas características de los personajes guardan cierta semejanza, noté mucha similitud en algunos gestos y en el lenguaje corporal general. De hecho, hay una secuencia en el capitulo cuatro (El bueno, el malo y el muerto) que recuerda en demasía a una del genial capitulo Isabella (S01E12) de Los Soprano.

El resto del elenco también es de primera. El dúo de agentes interpretado por Boyd Holbrook y Pedro Pascal es sensacional, logrando lucirse aun más que en la temporada anterior. El personaje de Tata, la mujer de Escobar, toma protagonismo y le permite a Paulina Gaitan brillar y brindar una excelente actuación.

Los “villanos” de esta historia (y futuros protagonistas de la temporada 3) interpretados por Damian Alcazar y Alberto Amman, no pasan demasiado tiempo en pantalla, sin embargo cuando lo hacen están más que bien. Hay que ver cómo los productores se las arreglan para explotar el talento de estos actores y al mismo tiempo ofrecer una tercera temporada sólida y atrapante sin el carismático Wagner Moura.


[imdb]https://www.imdb.com/title/tt2707408/?ref_=fn_al_tt_1[/imdb]

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Conclusión
Narcos Temporada 2 está por encima de su también excelente predecesora y da cátedra de cómo aprovechar el formato serie para contar una historia real de forma efectiva y original.
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