RECAP The Walking Dead 7×09: los que sobreviven

Regresaron los zombies. Tras un extenso parón, la serie que vemos por FOX volvió con la parte final de su séptima temporada. The Walking Dead 7×09 viene a intentar recomponer la relación del show con sus fans, muchos de los cuales quedaron disconformes con la narración bifurcada y lo (supuestamente) poco ocurrido durante los episodios que siguieron al explosivo season premiere, ese donde Negan se cobró sus promocionadas víctimas.

The Walking Dead 7×09: Rock in the Road

Obviamente ¡Spoilers!

Lo primero a favor: el grupo está unido. A pesar de la gran cantidad de escenarios que se fueron acumulando durante los capítulos iniciales, ahora arrancamos con nuestros héroes reuniendo fuerzas y queriendo convencer a las demás comunidades para enfrentar al villano. No será tarea sencilla, ni para los personajes ni para los creadores de la serie: todo lo plantado en la primera mitad de la temporada, que costó lluvia de críticas y pérdida de espectadores (en su emisión en vivo, con los visionados posteriores la caída de audiencia de la serie es mínima) ahora debe dar sus frutos.

La primera parada es justo donde nos dejó el episodio 7×08 (RECAP, ACA), en Hilltop. Gregory, quizás uno de los peores personajes que pasaron por el show (y miren que hemos tenido demasiados pésimos personajes), se mantiene en su cobardía y niega la ayuda que Rick anda buscando. Por suerte algunos miembros de la comunidad deciden unirse a la lucha. No son muchos para enfrentar la maldad inusitada de Negan, pero por algo se empieza.

El segundo destino es El Reino. Rick finalmente conocerá al Rey Ezequiel (Khary Payton) y su tigre. La sugerencia de Morgan hacia el monarca es que no se enfrente con Los Salvadores; ni siquiera haberse enterado de las muertes de Glenn y Abraham sirvió para que le aconseje luchar en esa batalla que promete ser sanguinaria. Rick intenta que Ezequiel los ayude, pues sin gente jamás podrán acabar con el reinado de terror del personaje interpretado por Jeffrey Dean Morgan: para ello cita una parábola (que da título al episodio) sobre una piedra en el camino cuyo mensaje es ayudame o te mato habrá una recompensa por tanto trabajo.

Ezequiel prefiere mantener las cosas como están y no meterse en problemas. Al menos deja que Daryl, el hombre más buscado por los salvadores tras su escape, se oculte en el lugar.

La mejor escena del capítulo

Mientras vuelven a Alexandría, el grupo encuentra la ruta bloqueada por decenas de vehículos. Pero no solo eso: también hallan gran cantidad de explosivos que los salvadores han utilizado como trampa. Es aquí donde todo el potencial de la serie sale a la luz: contra reloj y a puro ritmo, los personajes emprenden la tarea de quedarse con la dinamita tratando de no volar por los aires, al tiempo de borrar sus huellas volviendo a acomodar los autos que corrieron para cruzar, sumado a sobrevivir a una enorme horda de muertos vivientes que se acerca a ellos.

No era necesario que, cual Rápido y Furioso, Rick y Michonne utilicen el cable de la trampa para cortar a la mitad a cientos de zombies, pero… ¡a quién le importa, si estas escenas son las que dotan de vida a la serie! La parejita está finalmente de acuerdo en algo y, a lo lejos, la dinamita desechada por Rosita (ahora experta en explosivos porque el guion así lo dispone) vuela al resto de los zombies en mil pedazos.

Acción de la buena.

Gabriel ¿qué cornos te pasa?

Uno de los personajes que nunca encontró su lugar y, aceptémoslo, a esta altura jamás vamos a soportar, dio inicio al episodio pasando de la calma total a un brote que lo llevó a robar provisiones, tomar un vehículo y huir. ¿Por qué? ¿A dónde? No tenemos idea, pero Rick no cree que los haya traicionado y se aferra a una palabra escrita por el curita: bote. El mismo que Rick y Aaron visitaron en el episodio anterior.

Van todos hacia allí y, como la tranquilidad dura un segundo, son rodeados por una enorme cantidad de personas armadas y poco amistosas. La sorpresa llega en el plano final donde Rick, en vez de mostrar ira o preocupación, sonríe. ¿Otra vez se le saltaron los tornillos al protagonista?

¿Por qué sonríe Rick?

La pista podemos hallarla en el nombre del próximo episodio “New Best Friends“. ¿Es esta la ayuda que buscan? Lo cierto es que resulta desconcertante verlo sonreír cuando una decena de armas le apuntan directamente a la cabeza.

No está loco. No está teniendo ningún tipo de avería, está completamente sano en ese momento. Obviamente, si él sonríe de esa manera es porque siente que la situación en la que se encuentra puede mejorar. Está claro que hay algo por lo que Rick está sonriendo. Parece que están siguiendo el camino que Gabriel les ha impuesto y, de repente, se encuentran con esas personas…

Comenta Scott M. Gimple a TV Line, sugiriendo (tal vez) que Gabriel tiene algo que ver con esta nueva gente, a la cual conoceremos con el nombre de “Comunidad Junkyard”, sobrevivientes (no existentes en los cómics) que habitan en un espacio repleto de chatarra. No creemos hayan aparecido de la nada, ¿el espía de Alexandría es quién los condujo hacia ellos?

Cuando son rodeados por ese misterioso grupo, Rick ve soldados. Y por eso sonríe. No creo que esté preocupado ni por un segundo. Creo que mira y dice ‘Ok, necesito una victoria aquí, aquí hay mucha gente y tienen armas que es lo que necesitamos.

Cierra la idea Greg Nicotero, dándonos la seguridad de que Rick, sea quiénes sean, los llevará para su bando y los convertirá en piezas clave en la guerra contra Negan.

EPISODIO ANTERIOR | EPISODIO SIGUIENTE