Connect with us

Alta Peli

Series

The Leftovers: HBO lo hizo de nuevo (REVIEW)

The Leftovers: HBO lo hizo de nuevo (REVIEW)

Nadie tiene tan claro lo que quiere contar y se mantiene tan firme en ese camino como The Leftovers. Lluvia de críticas, odio enfervorizado, haters de Damon Lindelof saliendo de debajo de las piedras, le fueron al hueso para destruirla. Pero The Leftovers cerró su primer ciclo de una manera brillante, metiendo el dedo en la llaga, en ese dolor del que habla, profundizando emociones y tapándonos la boca a los que dudamos y dijimos ¿qué te pasó, HBO?

the leftovers critica

El comienzo fue confuso pues no teníamos demasiada idea qué nos iban a contar. Muchos salieron huyendo tras el primer capítulo por la incertidumbre, el desorden que el piloto mostró. Los realizadores enseguida nos dejaron claro que no importarían las respuestas, que no se explicaría a dónde fue ese 2% de la humanidad que se esfumo en un instante, que esto iría más sobre el cómo que el por qué. Ya he dedicado un extenso escrito sobre las similitudes y diferencias que esta serie mantiene con Lost (leánlo ACA) su punto de comparación inevitable, para tratar de descifrar de qué nos estaba hablando el show de HBO.

De qué se trata The Leftovers

The Leftovers habla de pérdidas y de cómo cada uno reacciona ante ellas. Habla de sentimientos complejos, de emociones que nos controlan, de profundo dolor, de no entender, de que no nos entre en la cabeza por qué se fueron otros y nos dejaron a nosotros aquí, solos. Y esa incertidumbre la traslada a una narración rota que se transforma en un rompecabezas, pero no de esos en los que hay que atar cabos y seguir pistas (que un poco lo hay), sino que es un puzzle emocional que sólo vas a armar si ves la serie dispuesto a dejarte llevar por un relato melancólico que roza la desesperanza.

No me dejes. Hay que olvidar. Todo se puede olvidar. Lo que ya se fue. Olvidar el tiempo de los malos entendidos y el tiempo perdido. Para aclararlos. Olvidar esas horas que mataban a veces a golpes de porqués, al corazón de la felicidad. No me dejes. No me dejes. No me dejes.

El episodio final, arrancando con Ne Me Quitte Pas en la desolada voz de Nina Simone, fue el clímax perfecto para una temporada marcada por la angustia de sufrir en silencio, por gritos desesperados que se resumen en esa imagen que nos parecía descolgada allá por el primer capítulo.

Leftovers-99

Pero todo cierra en ese caos donde la ausencia de respuestas adquiere más importancia que las propias preguntas. Y la altura con que terminaron la temporada no puede más que hacerla trepar escalones entre las mejores producciones del año.

Un final que te destroza pues pone ante tus ojos (llorosos) que el apocalipsis, el fin, no está obligado a consistir en zombies que quieren comerte o virus que se expanden a la velocidad de un rayo. El fin puede ser íntimo, vacío, silencioso. Y ese fin también puede ser el comienzo de algo que no estará libre de subes y bajas, de dudas, de darse golpes contra la pared una y otra vez. Un apocalipsis que se asemeja más a Melancholia de Von Trier que a cualquier otro intento del cine o la Tv para hablarnos de un futuro que se resquebraja.

The Leftovers es eso y supo transmitirlo, aunque en el camino pierda espectadores no dispuestos a un ritmo lento que te obliga a sentir, a abrir el pecho y permitirte que se te escape una lagrima.

1410247981478.cached

Todos hemos perdido a alguien o, lamento informarles, van a perderlo. Y la montaña rusa de emociones que supone la creación de Lindelof y Tom Perrotta hace uso y abuso de ello para decirnos que se puede volver a construir en los cimientos de lo roto aunque no es fácil, que buscar desesperadamente lo nuevo va a suponer desgarrarse internamente por no borrar eso viejo que te destroza recordar. Y en este punto, casi al final de la serie, entendés a esa secta de blancos fumadores, esos Culpables Remanentes, y su tortuosa ¿necesaria? misión. Y va a tocar fibras sensibles a través de una atmósfera enrarecida, espesa, desde esa pequeña pantallita donde no es fácil lograr lo que logran.

Del elenco sólo se pueden hablar maravillas. De Justin Theroux -por el que ninguno apostaba nada- con ese complejo Sheriff Garvey que en un principio no te importa pero que, como todo en esta serie, va a crecer y explotar; hasta esa belleza de personaje que es Nora Durst (Carrie Coon) en donde convergen todos los vaivenes anímicos y formas de expresar la ira y la sumisión. Pero no podemos dejar de destacar al gran Christopher Eccleston o a la gigante Ann Dowd (que con esta serie, más sus labores en True Detective y Masters of Sex, mete tres papelazos en las series clave del panorama actual). Injusto es nombrar solo a ellos cuando cada uno del elenco supo construir personajes que fuimos descubriendo y comprendiendo (que no es lo mismo que entendiendo) muy de a poco.

The Leftovers TV Series Wallpaper

A la banda sonora no queda más que aplaudirla: su compositor Max Richter logró deprimirnos como si lo tuviésemos tocando en nuestro living mientras esos personajes desnudaban su alma destrozada en la tele.

Los 10 episodios han dejado escenas que no olvidaremos. La lapidación de Gladys (Marceline Hugot), el flashback -por llamarlo de alguna manera- del padre Matt en el episodio 3, el grito desgarrador y silencioso de Nora al encontrarse con esos muñecos suplantando a los seres que perdió. Y nos dejan ganas de mucho más para lo cual, pese a ese perfecto final que tranquilamente podría haber funcionado como final de serie (sabiendo que respuestas no habrá), tendremos que esperar un año cuando HBO nos traiga la segunda temporada de su serie más apedreada, esa que apostó a contar lo que cuenta desde las entrañas y que contra todo pronóstico lo logró.

Gracias HBO, con The Leftovers lo hiciste de nuevo.

¿Te gustó lo que leiste? Ayudanos a seguir creciendo! 
-

Invitame un café en cafecito.app

3 Comments

More in Series

Trending

To Top