Un estudio sin experiencia en juegos de carrera encargado de desarrollar un juego sobre el subgénero más bizarro del mundo racing, nada puede malir sal. Hoy te contamos si vale la pena jugar Monster Truck Championship.

Quién no ha visto alguna vez, aunque sea un pequeño video de la Monster Jam, vehículos ridículamente potentes, montados en ridículas suspensiones, con ridículas ruedas enormes; carreras armadas, piruetas increíbles. En lo personal no soy un gran fan, pero recuerdo haber ido a ver la franquicia allá por el 2018 en La Plata. Monster Truck Championship pone en nuestras manos la oportunidad de recrear esa experiencia con un resultado sorprendente.

[ACTUALIZACIÓN] A mediados de Marzo, 5 meses después de su lanzamiento oficial, Monster Truck Championship recibió su actualización Next Gen para consolas Xbox Series y  Playstation 5. Conserva todo el contenido original y añade resolución 4K y 60 cuadros por segundo. No hay cambios ni ajustes en gameplays ni mecánicas ni contenido exclusivo de esta versión. El aumento de resolución favorece obviamente el aspecto del juego, dando como resultados gráficos más definidos, con colores más vibrantes y los 60 cuadros por segundo son super sólidos añadiendo una fluidez que se agradece.

Como aspecto negativo, hay que señalar que Monster Truck Championship no forma parte del programa Smart Delivery en Xbox, por lo tanto, si bien la versión de Xbox One se puede jugar vía retrocompatibilidad en consolas de nueva generación, si uno quiere disfrutar las bonanzas de la nueva versión, tendrá que volver a desembolsar dinero por el juego. El precio de la edición local sigue siendo reducido (poco más de 500 pesos la versión estandar) pero no me deja de hacer ruido tener que comprar 2 versiones del mismo juego para disfrutar todo su potencial. Si miramos para el lado de PlayStation este “inconveniente” pasa a tener un valor de 30 dólares, totalmente ridículo.

Como conclusión, si bien el juego es divertido y ofrece una serie de mecánicas originales, como la dirección independiente en cada eje, la escasez de contenido exclusivo de la versión mejorada hace que sea atractivo solo para aquellos que aún no han adquirido el juego, si depositaron su fe en el estudio y compraron el juego de lanzamiento es justo decir que se van a sentir un poquito decepcionados.

Nacon, junto a Teyon games, un estudio con unos antecedentes por lo menos polémicos (Terminator Resistence y Rambo The Video Game fueron sus últimos juegos) nos invitan a jugar con enormes y ridículos vehículos en Monster Truck Championship. La propuesta es arriesgada, podrían haber hecho un juego simple, chiquito, sin demasiada profundidad, apuntar al nicho  de consumidores de este tipo de espectáculos y esperar el dinero recostados en un mullido sillón.

Con bastantes similitudes al genial Wreckfest, resultó una experiencia súper entretenida y adictiva, que nos hará pasar horas frente a nuestra TV.

¿Por qué jugar Monster Truck Championship?.

16 vehículos personalizables, 25 arenas y 3 ligas son el contenido que tiene Monster Truck Championship para ofrecer, menús sencillos, controles personalizables y un salto a la acción directo. Podremos jugar una carrera rápida o saltar a la liga o realizar un tutorial; recomiendo el tutorial para aprender a realizar los trucos, dominarlos será necesario para obtener mayor reputación y mejores contratos de patrocinio, con lo cual podremos adquirir mejoras para nuestros vehículos. El juego, al contrario de otros como WRC9, no está licenciado, aunque se reconocen los modelos de los vehículos con facilidad, incluso de algunos míticos de la franquicia.

Opciones de personalización al jugar Monster Truck Championship

La jugabilidad está bien resuelta, la curva de aprendizaje es algo simple. La mayor dificultad está en dominar los trucos y la sensación de jugar con mando es satisfactoria. Me hubiese encantado poder probarlo con un volante, ya que hay numerosas opciones para personalizar el control. La sensación de esas suspensiones extremas, los choques y los rebotes está muy bien lograda, con un claro estilo arcade pero que no resulta plana.

Debido al tamaño de los vehículos en Monster Truck Championship, la cámara se vuelve confusa en algunas pruebas, como en los derby de destrucción, pero nada que resulte en extremo molesto.

Desde lo técnico es correcto, cumple en todos los aspectos, pero está lejos de ser perfecto. Sin embargo, esto no evita que jugar Monster Truck Championship sea en extremo divertido. Los modelos de los vehículos están bien, se pueden personalizar y, a pesar de no estar licenciado, se puede identificar vehículos icónicos como el Grave Digger o Big Foot. Las físicas están bien, el motor de destrucción también, obvio no es Asseto Corsa, pero el diseño de sonido también es correcto y el rugir de los motores V8 retumba en nuestro oídos.

Horas de diversión al jugar Monster Truck Championship

Quizás el punto más flojo de Monster Truck Championship es la poca variedad de escenarios y la “escasez” de contenido; paradójicamente este punto es inherente a la disciplina, estas carreras se realizan en estadios cerrados y por más que se puedan utilizar diferentes configuraciones del espacio, tarde o temprano volveremos a jugar en el mismo lugar y a repetir piruetas una y otra vez. Hay un apartado online para hasta 7 jugadores que funcionó de manera correcta, aunque costaba encontrar partida, pero esto lo adjudico a que tuvimos acceso al juego de manera anticipada.

En un escenario donde los videojuegos son experiencias complejas, profundas, que buscan exigir al jugador al límite con situaciones de simulación extrema. Monster Truck Championship nos lleva al origen de la industria y nos invita a jugar, a tirarnos en el sillón, desenchufar el cerebro y volver al fin primigenio de los videojuegos: divertirnos. Y es en este punto donde el juego brilla. En un 2020 difícil, agotador y desgastante, lograr distender y divertir es todo un logro.