Electronic Arts sale a las canchas con su gallina de los huevos de oro. ¿Qué novedades encontramos? ¿Vale la pena jugar FIFA 20?

Una vez más EA nos trae su franquicia anual de fútbol. Independientemente de cualquier análisis, millones de personas van a jugar FIFA 20: de todas maneras tenemos un trabajo por hacer, así que nos ponemos los botines y salimos al campo.

A primera impresión nos encontramos con un juego más pulido. La iluminación está más trabajada y se nota, luces, sombras, flashes de cámaras. Todos detalles que no hacen a la jugabilidad pero mejoran el combo. Tenemos muchas más animaciones que se notan en el control de pelota, los toques y jugadas de habilidad. La defensa se siente un poco mejor y la IA no es tan errática.

Las físicas también se notan más reales, las colisiones entre jugadores se comportan de manera más real. Eso sumado a una cantidad de escaneos fáciles enormes, hacen a esta versión muy cercana a la realidad. Esa búsqueda de realismo tiene una contra: la elección de la paleta de colores. Se lo nota un poco apagado, con un halo gris que rodea todo.

Si queremos experimentar la Champions League, tenemos que jugar FIFA 20. Su licencia estrella dice presente una vez más. Aunque perdió algunas como la Juventus o River y Boca, sigue teniendo un gran catálogo para seleccionar. La Bundesliga es la más favorecida, solo le falta un estadio y tiene más de 300 jugadores escaneados.

En términos generales se siente como una versión mejorada de su predecesor. Los relatos son los mismos: Palomo y Kempes en latino y su insoportable peluche. El diseño de menús también sigue siendo el mismo, con algunos retoques en FUT, y obviamente en el nuevo modo Volta.

En el modo carrera podremos personalizar nuestros DT’s de entre una selección de modelos femeninos y masculinos. En este modo hay un sistema de “moral” en donde los jugadores tendrán una mejora o una merma de rendimiento de acuerdo a las decisiones que tomemos. Los jugadores pueden adaptarse a nuevas posiciones, aunque todavía estos cambios son bastante aleatorios y no siempre son beneficiosos. Se han agregado cantidad de cosas que podemos personalizar en nuestro club.

Volta es la novedad al jugar FIFA 20. Tras el clamor de los usuarios por la vuelta de FIFA street, EA nos da Volta para saciar a las fieras. Volta es un modo donde se juega fútbol freestyle en distintos escenarios y con distintas configuraciones. 3vs3- 5vs5 con arquero, sin arquero, Volta cambia las reglas de manera continua. Podemos jugar con jugadores reales o personalizar nuestro personaje y jugar en modo campaña

Nunca sabremos si Alex Hunter cumplió el sueño de jugar en la selección y ganar un mundial. El camino se reemplazó con la historia de Volta. Si bien no era un gran logro en narrativa, Volta es todavía más flojo. Es una típica historia para adolescentes sobre el camino del héroe futbolístico.

No tengo dudas que Volta se transformará en el nuevo supermercado de EA. La disponibilidad de cientas de ropitas de colores será un imán para los obsesivos con tarjeta de crédito. Las opciones de personalización son inmensas. Desde botines, camperas, pantalones, accesorios, etc.

En cuanto a jugabilidad, Volta está bien. El alma del juego es hacer firuletes y los personajes harán jugadas de freestyle con solo apretar un botón. En este modo se aprecia el trabajo de captura de movimiento. El modo es llamativo, vistoso, con música durante los encuentros, pero la novedad pasa rápido.

Ultimate Team es quizás el modo mas popular y la máquina de hacer dinero de EA. Con el juego recién lanzado todavía falta para que salgan esos jugadores con siglas raras que son los que rompen el juego. Sin embargo, ya podemos ver usuarios que gastaron algo así como 2000 dólares para tener en su equipo a Messi, Ronaldo y demás leyendas.

FUT viene con algunas mejoras, la más evidente es en la animación para abrir los sobres. También tenemos desafíos que van cambiando e incentivan a jugar todos los días. De esta manera iremos acumulando puntos, sobres y más para más adelante.

El principal problema de FUT es que básicamente es un pay to win. Si bien se puede jugar, completar desafíos y juntar monedas para ir formando poco a poco un equipo competitivo, no es nada raro ver jugadores que invierten cientos de dólares para obtener una mejor plantilla. Debido a esto es que el juego online se desbalancea en base a dinero, lo que puede volver a FUT una experiencia frustrante.

En el apartado online, jugar FIFA 20 es una experiencia irregular. A veces funciona de maravillas, otras es un desastre. No son poco frecuentes la desconexiones o alta latencia e inestabilidad durante los partidos.

En términos generales la experiencia FIFA 20 es satisfactoria, se sienten las mejoras sobre su versión anterior. Pero la falta de rediseño en aspectos como los relatos, menús y el núcleo duro de la jugabilidad, hacen sentir a esta versión como una actualización. El añadido de Volta es un poco de frescura pero no llega a justificar el precio full de un AAA. Además, la perdida de ciertas licencias le juega en contra. Para nosotros los argentinos es una tristeza absoluta jugar un superclásico de Buenos Aires vs Núñez.

Seguramente a los seguidores de FUT se les haga muy difícil no comprar el juego. En este caso la mencionada continuidad es un aspecto positivo ya que traslada nivel y saldo de monedas. El jugador casual que se reúne con amigos para divertirse con partidos virtuales tiene una mejor opción acá.