Ubisoft lanzó una nueva entrega dentro de su icónica franquicia. ¿Será un copy paste del anterior? ¿Renovará la franquicia? En la siguiente nota trataremos de descifrar porqué tienen que jugar Assassin´s Creed Odyssey.

Este artículo tendrá poco misterio y las afirmaciones se irán soltando desde el principio. Ubisoft hizo casi todo bien en este nuevo Assassin´s Creed. Ya la elección del nombre no podía ser más correcta. Encarar este juego es toda una odisea. Según un diccionario, ésta es un viaje épico de larga duración, lleno de aventuras favorables y adversas. Esta definición no podría ajustarse más al juego.

Odyssey es un juego de rol/aventuras de proporciones míticas. Tiene un mundo tan vasto, detallado de manera casi obsesiva, donde uno puede llegar a sentirse perdido. Consta de 30 zonas llenas de iconos con actividades para hacer por todo el Egeo. Si bien estos puntos son algo típico de la franquicia, en Odyssey estas misiones secundarias funcionan de manera distinta.

Cada zona del mapa funciona como un juego más pequeño. Donde cada actividad que realicemos tendrá sus repercusiones en las siguientes, no es solo limpiar de iconos el mapa. Las líneas de dialogo dependen de las decisiones que tomemos y algunas misiones tienen múltiples formas de resolverse.

El mundo es enorme, pero esto es motivo suficiente para jugar Assassin´s Creed Odyssey? Puede ser, el mundo está muy bien detallado, con variedad de colores y texturas, se siente vivo. El agua esta muy bien lograda y la iluminación es simplemente hermosa, un paso más adelante que Origins, que ya era muy bello. Quizás el único punto negativo es el comportamiento de la lluvia, la cual parece no tener consecuencias en el mundo.

Este enorme y deslumbrante mundo se recorre con el nuevo modo “exploración” que viene activado por defecto. El mismo desactiva la mayoría de los marcadores y solo proporciona pistas vagas de donde se encuentran los objetivos. Para explorar podemos usar el águila para tener una mejor vista panorámica o hablar con distintos personajes hasta conseguir suficientes pistas. Esta modalidad quizás extienda por horas el juego, una opción más que bienvenida para esos jugadores ávidos de investigación.

Un mundo mas grande, mas vivo

Quizás este mundo tan amplio y con tantas conexiones hace que la historia principal se diluya un poco. Los personajes son profundos, entrañables, con el sello característico de la franquicia. Cualquiera sea nuestra elección Kassandra o Alexios, nuestro viaje nos llevará por incontables lugares de la antigua Grecia. Esta oferta abrumadora de líneas argumentales y sitios por conocer le juegan en contra de la historia principal, que si bien es amena y agradable se pierde un poco en su intento por abarcar demasiado.

Tampoco es posible correr hacia la historia principal y dejar en el camino las secundarias (como hago a menudo) ya que las distintas zonas tienen un requisito de nivel, como buen RPG, que nos obliga a realizar tareas secundarias para alcanzarlo. Esto no es necesariamente malo, ya que nos permiten disfrutar de la variedad del juego.

Si hablamos de variedad, vuelve el sistema de navegación al estilo Black Flag, pero mejorado. Hay un sistema de rivales que nos persiguen llamados “Mercenarios”, al estilo phylakes de Origins, pero mejor. También conserva el mismo sistema basado en niveles de Origins, pero una vez mas, mejorado. Esto puede servir para identificar una tendencia, jugar Assassin´s Creed Odyssey es enfrentarse a un juego que conserva cierta identidad pero que es mejor.

Tiempos de Guerra

En nuestro viaje por la Antigua Grecia nos encontraremos con facciones enfrentadas de manera recurrente. Cuando una facción controla una zona, podemos desestabilizar su control matando a soldados o quemando y robando suministros de sus campamentos. Cuando el control de una región disminuye mucho se abre una batalla de conquista. Alli podremos optar participar por alguna de las facciones y obtener una recompensa poderosa. En estas batallas cientos de soldados participan con enemigos de diferente nivel, pudiendo el enemigo hasta reclutar mercenarios. En este modo de juego brilla el sistema de combate de Odyssey y sus mejoras.

Los ataques normales generan adrenalina, la cual llena una barra que luego se puede gastar en cualquiera de cuatro nuevas habilidades. Al igual que en la E3 2018, la favorita volvió a ser el Spartan Kick. Una poderosa patada que remite a la película 300.

A pesar de ese poco de inconsistencia en la trama perseguir al culto del Kosmos es totalmente satisfactorio. A pesar de sus 44 miembros, que extienden la campaña durante muchas horas. Pero desbaratar a estos conspiradores hace lucir al sistema de diálogos  exploración de Odyssey. De algunos conocemos su identidad y ubicación, otros tendremos que localizarlos a partir de las pistas que nos ofrecen los habitantes del lugar o encontrar cartas perdidas con información preciada.

Los fanáticos de los antiguos juegos de Assassin’s Creed pueden descansar tranquilos sabiendo que el sigilo sigue siendo una gran parte de Odyssey. Todavía podemos marcar enemigos con el águila e infiltrarnos en fortalezas de manera furtiva. Algunos fallos menores en la inteligencia artificial se han observado. Guaridas que huyen de ningún peligro, o que reaccionan de manera errónea frente a alguna situación. De todas maneras este detalle no llegó nunca a arruinar el clima, siendo más bien gracioso o divertido.

A pesar de algunas fallas menores jugar Assassin´s Creed Odyssey es viajar a la antigua Grecia. Es recorrer esos hermosos paisajes sintiéndose parte de él. Es navegar, explorar, luchar, hablar y sumergirse de lleno en una experiencia gratificante. Odyssey es más que la suma de sus partes, en un sentido holístico en una obra soberbia. Te atrapa, te invita a jugar y a seguir descubriendo las consecuencias de nuestras acciones. Es quizás el mejor RPG contemporáneo después de The Witcher 3

¿Te gustó lo que leiste? Ayudanos a seguir creciendo! 
-