Los mejores episodios de 2014

Los mejores episodios de 2014 reúnen todo lo que un capítulo tiene que tener para pasar a la historia, para que siempre los recordemos especialmente de entre largas temporadas con incontables cantidad de capítulos. Son especiales, son únicos, son magistrales (de guion, realización e interpretación) del primer minuto hasta el último.

Son 10 verdaderas joyas que logran llevar la serie a una cima muy difícil de alcanzar, pero lo bueno es que suelen volver a superarse. Tal vez el resto de la serie no sea tan perfecto, pero al menos por un instante brillaron y demostraron lo que pueden llegar a dar. La magia de la televisión en estado puro.

Los mejores episodios de 2014

Puesto 10: Game of thrones

The Mountain and the Viper; Temporada 4, Episodio 8

Dirección: Alex Graves

O somos muy ilusos o bastante nabos pues seguimos creyendo que en Game of Thrones hay personajes intocables. Nos presentaron tremendo ídolo como es Oberyn Martell (Pedro Pascal), ¡no iban a matarlo! Si hasta pensamos ganaría la batalla; además perder implicaría la muerte de Tyrion, ¡eso sí que no!

El episodio nos hizo creer que Oberyn triunfaría y pergeñó una hora de tensión con nosotros esperando la victoria. Todo fue un engaño: el príncipe quería oír a la Montaña decir que mató a su hermana, el gigante aprovechó el momento dando un momento WTF enorme.

Pero también las otras líneas avanzan (vemos ese momentazo de Sansa dando un paso hacia la oscuridad y mintiendo por Petyr, el destierro de Jorah, el ascenso de Ramsay) y no hay diálogo que no sea un puntada certera del guion de uno de los mejores capítulos de toda la serie.

Impactante, conciso, todo lo que esperamos de la mejor serie del año.

Puesto 9: The Flash y Arrow, Crossover

Flash vs Arrow (The Flash S01E08), The Brave and the Bold (Arrow S03E08)

Dirección: Glen Winter / Jesse Warn

Las hacemos compartir el puesto pues el crossover sumó dos horas de duración (una de cada serie) para dar el espectáculo más entretenido del año.

En la primera parte, Oliver Queen y su equipo visitaron las tierras de Barry Allen, en la segunda fue al revés, pero juntas dieron acción desenfrenada (pelea épica entre ambos héroes incluida) y con mucho tacto definieron en vivo frente a nuestros ojos la esencia de dos shows tan opuestos como complementarios. Fue casi como un ejercicio semántico en el cual ambas series se influyeron con sus universos y le prestaron a su hermana un poco de lo mejor que tienen.

Oscuridad y brillantez, humor y drama, pasado tortuoso y poderes paranormales se entremezclaron y contribuyeron a hacer avanzar cada trama hacia su recta final de mitad de temporada. Show puro, show que no subestima a nadie, show del bueno.

Puesto 8: Girls

Flo; Temporada 3, Episodio 9

Dirección: Richard Shepard

La comedia de HBO logra ese capítulo de oro que para todos será siempre “el de la abuela de Hannah”. Lenna Dunham retrata las familias y las diferencias entre sus miembros con una grandeza que sorprende.

La abuela (June Squibb) está a punto de morir y va a ser motivo para reunir a toda la familia, sacando a relucir miserias y rencores guardados en el tiempo. Siempre con un gran sentido del humor basado en la identificación.

A su vez veremos la relación de Hannah y Adam (Adam Driver) ponerse a prueba: para conformar a la abuelita le dicen que se van a casar, una mentira que impactará de formas insospechadas en la parejita de queribles idiotas.

Sensible, divertido, dramático, todo por el mismo precio y en menos de media hora.

Puesto 7: The Affair

1; Temporada 1, Episodio 1

Dirección: Mark Mylod

El mejor piloto del año. Así, sin más. De entre decenas y decenas de series nuevas, The Affair logró el primer capítulo más perfecto, cautivador y misterioso de este 2014.

Es simple y es lo más complicado del mundo. Una infidelidad que va a ser relatada desde dos puntos de vista: el de él, Noah (Dominic West) y el de ella, Alison (Ruth Wilson). Y las dos versiones dividen al episodio, media hora para cada una, donde las piezas no encajan, la visión no es la misma, instando al espectador a “encontrar las diferencias”. Y además estamos en un extenso flashback pues, a lo True Detective, los protagonistas están sentados frente a un investigador tratando dilucidar un crimen que no sabemos quién cometió ni quien es la víctima.

Sugestivo, sensual, este juego de perspectivas nos pone hábilmente ante dos miradas que no ven lo mismo, antes dos personas cuyos recuerdos de la misma situación dista tanto que no sabemos si en realidad están intentando ocultar algo.

Puesto 6: Masters of Sex

Fight; Temporada 2, Episodio 3

Dirección: Michael Apted

El punto alto de una segunda temporada muy irregular. Si siempre decimos que Masters of Sex es “la Mad Men del sexo” en Fight las pruebas están sobre la mesa.

Un episodio centrado en sus dos protagonistas encerrados en el cuarto de un hotel, casi sin nadie más que ellos dos (el bebe sin sexo definido es el disparador perfecto), con un combate de box de fondo que se desarrolla durante todo el capitulo.

Y ese combate se producirá en la tele pero sobre todo entre Virginia (Lizzy Caplan) y Bill (Michael Sheen) que desnudarán su pasado, sus temores, su verdadero ser. Nunca los dos protagonistas fueron tan sinceros uno con el otro, nunca quedaron tan expuestos, nunca fueron tan humanos. Y esa sinceridad la toma el capítulo que deja fluir diálogos y a sus seres conocerse sin saber si lo que descubrirán del otro les gustará.

Puesto 5: Homeland

There’s Something Else Going On; Temporada 4, Episodio 9

Dirección: Seith Mann

La serie que una vez dimos por muerta se despachó con un episodio que podría llegar a convertirse en paradigma del thriller televisivo.

Tensión al extremo, un intercambio de rehenes que pone al espectador de los pelos sabiendo que ya en la serie nadie está verdaderamente a salvo y un giro final desesperante.

There’s Something Else Going On funciona como punto de inflexión para las diferentes tramas que esta nueva Homeland venía presentando, como sumun moral de los protagonistas y como prueba a los nervios del espectador. Cada minuto cuenta para salvar a Saul (Mandy Patinkin) y para que Carrie (Claire Danes) no se pierda en esa vorágine sin límites en la que está inmersa, que la convirtió en esa “reina de los drones” sin corazón que nos quisieron hacer creer que era.

Puesto 4: Orange is The New Black

A Whole Other Hole; Temporada 2, Episodio 4

Dirección: Phil Abraham

El episodio en que conocemos en profundidad a Morello (Yael Stone) ocupa uno de los lugares más destacados en esta lista porque la construcción que hacen del personaje es brillante.

Siempre de buen humor, imaginando esa boda imposible con Christopher, “su gran amor”, banal, rodeada de revistas de moda, Morello era una mujer frágil dentro de Litchfield. En este capítulo vemos a través de los flashbacks que no es la inofensiva persona que creíamos y descubrimos su lado psicópata de acosadora peligrosa. La tristeza con la que la retratan no hace más que afirmar que aunque la serie de Netflix presente con cierto humor a las reclusas, sus vidas han sido tan crueles como devastadoras.

La variación de tonos que hace ruido cada vez que llaman “comedia” a este show tiene aquí su cima cuando por un lado las presas descubren que la vagina tiene dos agujeros y se conocen tan profundamente como nosotros vamos a conocer a Morello con su pasado, mientras las demás mujeres de la serie continúan sus transformaciones tras las rejas. Ejemplo de pulso narrativo y de claras convicciones en lo que se quiere contar y en la manera de hacerlo.

Puesto 3: Mad Men

The Strategy; Temporada 7, Episodio 6

Dirección: Phil Abraham (otra vez en la lista)

Capítulo al que ya me referí pues a él pertenece una de las 10 mejores escenas del año en la que Don (Jon Hamm) y Peggy (Elisabeth Moss) bailan al son de Frank Sinatra y My Way. Un episodio que te llega al alma como pocas veces el cine o la Tv logran hacer.

La serie está decidida a despedirse a lo grande y The Strategy es muestra clara de ello. La relación entre Draper y Olsen ha cambiado pero en el fondo sigue siendo la misma. Una estrategia promocional va a dejar al descubierto dudas personales y laborales, con Pete (Vincent Kartheiser) en New York jugando a ser Draper, mientras Joan (Christina Hendricks) siente su soledad y se enfrenta al regreso de Bob. Un capítulo intimo, de charlas que sacuden la estantería y una excelencia de la que sólo Mad Men es recurrente. Con una escena final de esa “familia” unida (Don, Peggy y Pete) que te llega al corazón. Todos los conceptos de la serie aúnan en este capítulo a un paso del final.

Puesto 2: Hannibal

Mizumono; Temporada 2, Episodio 13

Dirección: David Slade

Final de temporada abarrotado de sangre y violencia extrema. El mejor final de temporada de cualquier serie este año. Pero Mizumono, dejando a todos los protagonistas al borde de la muerte, es más que eso. No sólo es de lo más impactante visto este 2014 sino que además podría llegar a funcionar como un perfecto final de serie (cuando lo rodaron la cadena NBC no la había renovado y el show tenía mas chances de no volver nunca que de otra cosa).

Todos los personajes tenían que lucirse quizás ante su ultima oportunidad en TV por lo que Bryan Fuller les dio su momento de gloria a cada uno. La paranoia desatada tratando de atrapar al inatrapable Dr. Lecter lleva cada personaje a un clímax perturbador. El episodio se va desarrollando con ese ritmo único, con todos sabiendo la verdadera naturaleza del protagonista, bajo una hipnótica banda sonora que convierte al capítulo en lo más poéticamente retorcido visto en mucho tiempo.

El capítulo es una perfecta pieza que lleva a otro nivel el clásico juego del gato y el ratón y hay hasta escena post-creditos por si ya no habíamos quedado con la boca por el piso.

Puesto 1: The Leftovers

Guest; Temporada 1, Episodio 6

Dirección: Carl Franklin

La gran serie de HBO que no entró por muy poco en nuestro Top 10 de las series del año dio en su sexta entrega un capítulo tan pero tan grande que hasta podríamos mirarlo por fuera de la serie y se disfrutaría igual.

Guest relata la vida de una de los mejores creaciones del show, Nora Durst (Carrie Coon) cuya familia completa desapareció en ese “rapto misterioso” del 2% de la humanidad. Y con una sutileza envidiable, el episodio desmenuza al personaje hasta dejarlo prácticamente desnudo frente a nosotros, exponiendo sólo el dolor de esta mujer, su negación a seguir adelante y el deseo irrefrenable de hacerlo. Conmovedor, durísimo, místico, el capítulo hila finalmente algunas conexiones de esa serie en que algunos “no entienden nada” y nos hace llorar a mares con ese abrazo que resume la desazón con la que viven los personajes, las sobras, the leftovers.