¿Stranger Things basada en una historia real?

Así como lo leen: el último hit de Netflix parece no solo haberse inspirado en los mayores clásicos de los 80 (cuyas referencias podes ver ACA), sino que además pudo haber tenido un atisbo de realidad. ¿Stranger Things basada en una historia real? Sí, resulta asombroso para muchos (no tanto para los más excéntricos) descubrir que esta serie de ciencia ficción recreó en pantalla pruebas realizadas en la vida real, llevadas a cabo ni más ni menos que por la Agencia Central de Inteligencia estadounidense, más conocida como CIA.

Quienes fuimos testigos de las cosas extrañas que atravesaron la vida de esos personajes que ahora queremos tanto, sabemos los sucesos terribles por los que tuvo que pasar Eleven desde pequeña. La pobre joven se banco las de Caín siendo el conejillo de indias de experimentos tan crueles que solo pueden ser obra de ficción ¿No es así? En realidad, ese es el problema: no son solo ficción.

¿Stranger Things basada en una historia real?

Pocos conocen que en un principio este original de Netflix se iba a titular Montauk, nombre elegido haciendo referencia a la Estación de la Fuerza Aérea de Montauk (también llamada Camp Hero) en Long Island, donde -presuntamente- se llevaron a cabo varias pruebas de índole similar a las que fue sometida la niña tan perfectamente interpretada por Millie Bobby Brown.

Estos experimentos formaron parte de diversos programas, tales como el mismo proyecto Montauk y el que más nos interesa en esta nota: el proyecto MKUltra. Este último es la conexión de Stranger Things con la realidad. Si no les suena, es porque no han sido lo bastante observadores. Todo lo que le hicieron hacer a Eleven para explotar sus habilidades, formaba parte de esta investigación. Pará, pará, pará… ¿dónde dicen eso en la serie? Bueno, en verdad no lo dicen, no exactamente.

En el tercer capítulo de esta primera temporada, el Sheriff se da cuenta que hay algo que no cierra sobre el Departamento de Energía del gobierno y decide ir a la biblioteca a investigar. Allí encuentra un documento en el que aparece el Dr. Martin Brenner con los -por ese entonces- integrantes del proyecto MKUltra, realizado por la CIA.

Si bien tanto el articulo como la foto expuesta fueron creados especialmente para la serie, el proyecto es tan real como la persona que se encuentra leyendo esta nota.

Proyecto MKUltra ¿Qué @&$%* es eso?

El gobierno estadounidense lo inició en 1953 con el objetivo de obtener información secreta de sus enemigos cautivos, a través del control mental (y si de paso los podían convertir en robots patriotas, bienvenidos sean). No es casualidad que se trate del mismo año atribuido al inicio de la Guerra Fría. En esos tiempos, ambos bandos hacían lo que fuera necesario para conseguir alguna ventaja sobre su rival.

Una vez descontinuado el proyecto, se destruyeron casi todos los documentos que registraban las actividades de la CIA en él; aunque unos años después se hizo pública la existencia de MKUltra. Con algunos espacios en blanco generados por la falta de evidencia, se llegaron a conocer los experimentos o, mejor dicho, torturas llevadas a cabo en los bastos establecimientos que formaban parte del programa.

Cualquier similitud con la ficción, no es pura coincidencia.

Algunas de las pruebas se basaban en la utilización de hipnosis, abuso sexual y privación sensorial (¿Les suena esta última?). Otras consistían en la aplicación de sustancias que alteran severamente al cerebro -como LSD-, para estudiar sus efectos en el comportamiento. En ocasiones, también las empleaban para dejar incapacitada mental y físicamente a la persona. ¿Alguien en el fondo mencionó a la madre de Eleven?

Así como nuestra amada niña con poderes, la gran mayoría de los sujetos experimentales no eran conscientes del por qué los estaban sometiendo a estos estudios. Incluso, a algunos agentes de la CIA les agregaban LSD en el café sin que se dieran cuenta. Los efectos eran bastante predecibles y, de hecho, uno de ellos (probablemente no el único) llegó a suicidarse… eso, o lo suicidaron las autoridades.

Se calcula que había alrededor de 100 instituciones en todo Estados Unidos y Canadá (incluyendo Montauk) en las que se practicaban estas torturas. Entre los sujetos de prueba había de todo: prisioneros, prostitutas, enfermos mentales e incluso niños arrebatados de sus padres que (con ayuda de dichas sustancias) olvidaron quiénes son y de donde vinieron. Éstos pequeños pasaban a creer que sus captores eran sus verdaderos padres.

¿Esto se sigue haciendo?

Se supone que no. El proyecto MKUltra fue completamente descontinuado en 1973. Algunas bases dedicadas a ese y otros programas, fueron dadas de baja y reutilizadas para diversas actividades.

Por ejemplo, en 2002 la Estación de Montauk fue reformada y abierta al público con el nombre de Camp Hero State Park. Inicialmente la idea era convertir la base en un museo de la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría pero, irónicamente, este lugar donde se infringió tanto sufrimiento es ahora (como su nombre lo indica) un parque estatal donde se puede hacer ciclismo, pesca, equitación, excursionismo y otras actividades recreativas. Hablando de meter todo bajo la alfombra.

Hoy en día no se duda que el programa se haya detenido, pero si tales torturas llegaron a realizarse una vez ¿quién dice que no pueden volver a pasar? ¿Quién asegura que alguna vez se detuvieron?

Dicen que la realidad supera la ficción. No cabe duda de ello.

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