Tras su tercer fin de semana en cartelera, el film protagonizado por Paul Rudd se hundió a manos de Creed 3 y nos preguntamos: ¿el fracaso de Ant Man 3 puede significar el principio del fin del MCU?

Hace casi cuatro años, allá por el lejano 2019, llegaba a los cines Avengers: Endgame y el mundo se volvía completamente loco. De repente el FOMO invadía a la gente y todos querían ponerse al día para no perderse ese evento histórico. Miles de personas hacían malabares para verse las 21 películas anteriores, leían artículos e hilos de Twitter acerca del modo de visionado, discutían si convenía hacerlo cronológicamente o si era más adecuado verlas en orden histórico. Como fuese, nadie quería quedarse afuera del acontecimiento que significaba el cierre de la Saga del Infinito.

Hoy, con un 2023 en pañales, el panorama es totalmente diferente. Ya no se hacen largas filas para ver las películas de Marvel, la crítica “especializada” no acompaña tanto, y los números de recaudación se desploman sin miedo. Tanto es así que el fracaso de Ant Man 3 sorprendió a pocos y tras su tercer fin de semana se fue a la lona noqueada por Creed 3.

¿Hora de tirar la toalla como espectadores del MCU?

De repente, nos encontramos con que la factoría Disney/Marvel ha convertido la franquicia más rentable de todos los tiempos en una máquina de hacer churros, un copia y pega de manual, “el xerox of a xerox” citando a BoJack Horseman. Y es que ¿quién diría que sacar 10 películas al año con el mismo humor, el mismo ritmo y la misma forma de narrar, afectaría la calidad de las producciones?

Aunque sentenciar que Disney/Marvel sacaban 10 películas al año suene a una hipérbole cuasi ridícula, los números no están tan alejados de esa afirmación en términos nominales de producciones del MCU. Hagamos un repaso.

La vida después de Thanos

Haremos de cuenta que el nefasto 2020 no existió, así que directamente saltamos al 2021, año en el cual tuvimos nueve producciones del MCU en total. Cuatro fueron películas (Black Widow, Shang-Chi y la Leyenda de los Diez Anillos, Eternals y Spider-Man: No Way Home), y cinco fueron series (WandaVision, Falcon and the Winter Soldier, Loki, What If? y Hawkeye).

El pasado 2022, el MCU estrenó tres películas (Doctor Strange en el Multiverso de la Locura, Thor: Love and Thunder y Wakanda Forever) y tres series (Moon Knight, Ms. Marvel y She Hulk o Abogada Hulka para los amigos españoles), lo que da un total de seis producciones. Si contamos el especial de Guardianes de la Galaxia y Werewolf by Night, se eleva el número a ocho. Solo una menos que en 2021.

Este 2023 recién comienza, pero ya tuvimos a Ant Man 3, luego le seguirán Guardianes de la Galaxia Vol. 3 en mayo, The Marvels en noviembre, y en algún momento de este año tendremos la serie Invasión Secreta y la segunda temporada de Loki, dando un total de cinco producciones del MCU.

En ese panorama, que Ant-Man and the Wasp: Quantumania fracase no debería sorprender a nadie: nos encontramos ante una formula gastada, con un público que ya no puede ni tiene ganas de ver 3 películas al año de dudosa calidad, ni de invertir su tiempo mirando series que no llevarán a ningún lado. Y si ni los propios productores y guionistas de Marvel le ponen amor a sus películas y series, ¿por qué la gente debería hacerlo? O mejor dicho ¿por que nosotros, los espectadores, deberíamos hacerlo?

No puede quedar afuera de esta discusión el tema del CGI, que ha visto reducir seriamente su calidad en las últimas producciones. No es que nosotros seamos perfeccionistas con los efectos visuales, es que desde la empresa del ratón parecieran ser muy codiciosos: no logran darle tiempo a sus artistas para que realicen una buena labor, dando pie a rumores de explotación laboral y pésimas condiciones en las que deben trabajar.

El fracaso de Ant Man 3

El resultado está a la vista, literalmente. Han estado apretando tanto las tuercas, viendo hasta dónde podían llegar con la misma fórmula, que a esta altura parece que les da lo mismo hacerlo bien que simplemente hacerlo.

La nota positiva radica en que, a la vez, los ejecutivos están tomado nota del hecho y han retrasado varias producciones de interés menor previamente programadas para este 2023, intentando quizás priorizar la calidad por sobre la cantidad.

Y aunque el fracaso de Ant Man 3 puede ser el principio del fin del MCU tal como lo conocemos, no es que ya no quede espacio para nuevas historias de superhéroes. El éxito que cosecharon The Batman en pantalla grande o The Boys en la chica, dan cuenta de ello. Para lo que no queda espacio, ante tamaña competencia, es para historias mal contadas, visualmente pobres, hechas más como un producto que como una obra artística. Lo que no queda es espacio para más películas sin alma de Marvel, como lo fue Quantumania.